En este blog y en todos los medios dedicados al Real Estate en nuestro país, llevamos tiempo hablando del cambio del cliente actual. Sus demandas han evolucionado, especialmente durante la pandemia, y su forma de relacionarse con vendedores o arrendatarios, también. En esta situación, la posventa cada vez se cuida más y en ello trabajan promotoras, constructoras e inmobiliarias.
Las empresas del sector se esfuerzan por ofrecer las mejores soluciones para que compradores y arrendatarios tengan suficientes herramientas para tomar sus decisiones, a la hora de comprar o alquilar una vivienda. Y, por supuesto, las mejores herramientas para presentar dudas, reclamaciones o incidencias, porque el servicio posventa puede ser un elemento clave y diferencial en un sector con tanta competencia como el inmobiliario.
Cómo funciona la posventa en el mercado inmobiliario
En cualquier negocio, la atención al cliente es imprescindible para su crecimiento. En general suele hacerse bien en las fases iniciales del proceso, en la preventa y venta. Pero no todas las compañías cuidan del cliente cuando ya ha comprado y esto puede hacer que no se generen más clientes, pues con un propietario contento pueden venir otros recomendados pero no así con uno insatisfecho.
Un riesgo que se puede evitar en el mercado inmobiliario teniendo en cuenta las necesidades de los clientes actuales y aprovechando las nuevas herramientas tecnológicas existentes. De ello hablamos en una de las Experiencias Prinex celebradas este año, donde conocíamos de primera mano la de Habitat Inmobiliaria y Becorp, utilizando software inmobiliario para su gestión.
En este encuentro, se destacaba que el cliente actual cada vez es más tecnológico e impaciente, así que hay que atenderle utilizando herramientas que le ayuden a resolver sus dudas, a plasmar sus quejas o incidencias, y a hacerlo de forma rápida. De hecho, en el servicio posventa hay que tener en cuenta aspectos que van más allá del trato amable, como son:
- Tiempo de respuesta y resolución.
- Profesionalidad y calidad del servicio, con servicios de asesoría.
- Seguimiento de los problemas del cliente y su gestión.
- Comprobación de las incidencias más habituales para solventar los problemas en ese apartado y mejorar de cara al futuro.
Tecnología al servicio de la posventa
Para todo ello, las innovaciones tecnológicas de los últimos tiempos también están al servicio de las empresas del sector inmobiliario. Existen herramientas que, como Prinex Posventa, mejoran y automatizan la gestión de los servicios posventa. Son softwares inmobiliarios con funcionalidades que permiten:
- Crear incidencias pre y posventa en la visita del inmueble. Además, desde cualquier dispositivo móvil.
- Gestionar las mismas por parte del supervisor, ya sea asignando responsabilidades a proveedores o viendo el estado de las incidencias.
- Emitir partes de trabajo para proveedores.
- Comprobar y documentar la resolución de las incidencias.
- Comunicarse de forma continua con el cliente.
- Crear un Big Data para su explotación y futura toma de decisiones.
Todo ello, con el objetivo de dar al cliente final todas las opciones que necesite para resolver sus dudas o problemas, y que además pueda hacerlo de forma directa, desde cualquier lugar y a cualquier hora.